Tras una victoria por cuatro goles, y más después de la derrota frente al Alcorcón, ayer no era día para "meter la pata". Por eso el técnico deportivista, José Luis Oltra, midió su discurso al término del encuentro que enfrentó al Deportivo frente al Guadalajara. "La semana pasada lo hicimos mal, había que decirlo, pero no todo estaba mal", dijo en referencia a la goleada que encajó el equipo la jornada pasada. "Por mucho que yo diga, todo era muy malo", añadió. Por este motivo, el entrenador blanquiazul se mostró partidario de "analizar" lo sucedido esta semana del mismo modo que lo hizo la anterior y "pasar página".

"Cuando estamos bien podemos ganar a cualquiera", reflexionó el valenciano cuando le cuestionaron sobre la posible "euforia" que pueda aparecer en el equipo y su entorno tras el resultado positivo de ayer. "Cuando no estamos bien -continuó-, por muy buenos que seamos, nos pasa por encima cualquiera". Así es que más que "magnificar" lo sucedido ayer sobre el césped de Riazor, su trabajo consiste en "pasar página" lo antes posible para centrarse en el próximo compromiso del equipo.

Para esa fecha podrá contar, salvo contratiempo, con Valerón. El papel del canario y su aportación fue ayer de nuevo una de las preguntas para el entrenador, quien intentó esquivar la cuestión y regatear el "juego" en el que, según sus palabras, se convierte cada una de sus comparecencias posteriores a los encuentros que disputa su equipo. "El fútbol en el Deportivo no se acaba cuando no esté Valerón", respondió sobre el canario. "El día que no esté tan acertado, vendrá el otro debate sobre si tiene que jugar los últimos 20 minutos", aventuró sobre futuras actuaciones en los siguientes partidos.

El de ayer, dijo, fue la más "tranquilo" y el más "completo" de todos cuantos ha dirigido desde su llegada al Deportivo. Más que por el resultado por "las sensaciones". "El equipo ha tenido atención, corazón y mucho acierto", concluyó.