Este no esta siendo solamente el año en el que el Dépor se tiene que adaptar a la realidad que supone la Segunda División. También los periodistas de radio tenemos que sobrevivir a un nuevo concepto que pasa por impedir que hagamos nuestro trabajo. Como lumpen que somos para los clubes, tenemos que buscarnos la vida para cumplir con nuestra audiencia. Así, en Radio Coruña hemos ido contando los partidos del Dépor con rigor, aunque camuflados entre el graderío como si fuésemos delincuentes. Aunque en esta ocasión, no nos escondimos. El aficionado que acudió este sábado a El Collao lo pudo ver con sus propios ojos. Sobre la grada de Gol A emergió, de repente, una grúa hidráulica en la que se veía a tres locos: junto a mí, Ismael Mayor y Pepe Aroca, narrador y colaborador de Radio Alcoy, respectivamente. Algunos no se lo podían creer. Pero allí estábamos los tres subidos a la grúa, con la bandera de la SER ondeando en el cielo alcoyano y desafiando a Mediapro y a la Liga. La picaresca en estado puro. Si las radios no pueden acceder al campo para radiar en directo... pues lo hacen desde fuera del campo. Y así hicimos nuestro Carrusel Deportivo Coruña. Esta aparatosa hazaña contó con toda la legalidad. Radio Alcoy pidió todos los permisos necesarios a la Policía Local y al Ayuntamiento para instalar una grúa en el aparcamiento municipal. También nos aseguramos de cumplir las normas de seguridad subiendo a la plataforma con arneses y cascos.

Oltra y la expedición del Deportivo se quedaron petrificados al vernos. Una sonrisa se dibujaba en sus bocas. Algunos hasta me llamaron por teléfono ante tremendo espectáculo. Pero lo mejor fue como la gente de Alcoy reconocía el trabajo que hacíamos. Como nos animaban a seguir así, como nos ofrecían agua o comida. Incluso desde alguna casa nos cedieron sus enchufes para conectar nuestros equipos a través de un alargador.

He de reconocer que mi nueva cabina de retransmisiones no me daba toda la seguridad del mundo. Que el frío me azotaba de manera cruel. Pero al verme a quince metros sobre el suelo, con una perspectiva del campo envidiable, y pudiendo burlarme de los que nos quieren impedir que trabajemos, me sentí muy bien. Noté una adrenalina excitante. Desde las alturas contaba para Radio Coruña el partido ante el Alcoyano. Lástima la derrota del Dépor.