El Dépor traspasa fronteras. Y si no que se lo digan a los niños del orfanato Joachim Anbagam en Trichy (India), que demostraron con sus cánticos lo buen deportivistas que son.

Decenas de pequeños hindúes siguen a la perfección la letra de este pequeño himno que se escucha cada fin de semana en Riazor o allá donde juegue el Deportivo. Ahora, gracias a los seguidores deportivistas que hay por el mundo la pasión blanquiazul se extiende por los cinco continentes.