La capilla ardiente del piloto italiano Marco Simoncelli , instalada ayer en el Teatro Municipal de Coriano, recibió la visita de cientos de 'tifosi' que dieron su último adiós al '58', fallecido el pasado domingo tras una grave caída en el Gran Premio de Malasia.

Varios centenares de seguidores esperaron a las puertas del Teatro y estallaron en un aplauso espontáneo cuando llegó el féretro del joven corredor, en torno a las 8.00 de la mañana.

Dentro de la capilla, se encontraba la Gilera con la que conquistó el Mundial de 250cc en 2008 y que era una de sus motos favoritas. Al otro lado, la Honda con el dorsal '58' con la que corría este año.

Los visitantes, todos con flores, pudieron ver al fondo una imagen proyectada de un Simoncelli sonriente. Las muestras de afecto, las flores y la camisetas con el '58' se han podido encontrar en todos los rincones de Italia.

El funeral, en la iglesia de Santa Maria Assunta de Coriano, tendrá lugar hoy a las 15.00 horas y será retransmitido en directo por la RAI. Se espera que acudan unas 60.000 personas.