El tren del derbi llega justo a tiempo para Borja Fernández y Bruno Gama, dos de las múltiples opciones con las que cuenta José Luis Oltra para cubrir las bajas del sancionado Jesús Vázquez y de Andrés Guardado, citado para el México-Serbia de la próxima madrugada. Mientras el técnico medita cuál es la mejor solución en cada caso, ambos futbolistas se declaran listos para jugar desde el inicio. Hasta ahora su presencia ha sido testimonial por culpa de las lesiones. Bruno Gama debutó en partido oficial el pasado lunes, en Murcia, donde disfrutó de sus primeros cinco minutos en Liga como deportivista. Borja, por su parte, aún no se ha estrenado. Desconocen si formarán de salida ante el Celta, pero no ocultan su ilusión por participar en una cita tan singular. "Un derbi siempre es un partido de características diferentes", explica Bruno. "Es un encuentro señalado -apunta Borja-. Notamos que es especial, en el entorno, en nosotros mismos, en el club y en la afición".

Pese a que solo llevan unos meses en A Coruña, saben perfectamente lo mucho que significa el clásico del domingo para el deportivismo. La hinchada se volcará más que nunca con el equipo y eso supone un acicate más para los protagonistas. "Siempre que jugamos en casa la afición nos motiva mucho y contra el Celta esa motivación todavía va a ser mayor", continúa Bruno. En La Nueva Condomina, donde debutó oficialmente con el Dépor, tuvo "buenas sensaciones" y no notó "ninguna molestia". Solo fueron cinco minutos, suficientes para marcharse "contento" y con muchas ganas de "seguir trabajando para tener más minutos". El extremo portugués brilló con luz propia en pretemporada, convirtiéndose en la gran sensación del verano. Luego llegó su lesión en el Teresa Herrera y la posterior recaída que le ha mantenido parado hasta ahora: "Es muy bueno sentirse otra vez útil porque estar mucho tiempo lesionado es muy malo". ¿Será titular el domingo? "No lo sé. No tengo ni idea. Vamos a ver".

Su incertidumbre es similar a la de Borja. El ourensano tampoco sabe si tendrá cabida en el once. "En principio hay tres futbolistas para dos puestos (Álex, Juan Domínguez y el propio Borja) y no sé si el míster ha hablado con alguien o no. Yo solo he hablado con él cosas normales. Me pregunta qué tal voy y si estoy preparado. Le he dicho que estoy bien porque ya la semana pasada me encontraba mejor y esta semana he mejorado mucho. Estoy a tope y preparado para jugar", recalca el mediocentro.

Debute o no el domingo, confía en que los tres puntos se queden en Riazor en un derbi que prevé igualado. "Nadie quiere ser favorito cuando se llega a estos encuentros. Todo el mundo quiere ir de víctima. Creo que va a ser un partido muy igualado y ojalá caiga para nuestro lado. Si hacemos las cosas bien va a ser muy difícil que se dé un mal resultado", proclama Borja, deseoso de darlo todo defendiendo su nueva camiseta. "Yo soy jugador del Deportivo y si me salen mal las cosas no va a ser por un pasado o por unas palabras, va a ser porque salen mal y ya está. Espero que todo salga bien y si me toca entrar, que salga perfecto", concluyó.