Oviedo y Compañía de María eran los favoritos para el ascenso, por eso el partido inaugural de la fase de ascenso a Primera División, que los enfrentaba, era como una final anticipada y el triunfo fue para los asturianos por 5-2. Esta derrota dejó a los coruñeses a expensas de un pinchazo de los locales -la fase se disputa en el pabellón ovetense de Villafría-, que en la jornada vespertina no fallaron ante el Burgos, al que se impusieron por 7-4 para confirmar el ascenso a la categoría de plata.

Por la tarde, el conjunto dirigido por Ramón Canalda hizo los deberes al ganar al Josaleta por 10-7, pero ya era demasiado tarde porque en el encuentro anterior el Oviedo había ganado al Burgos y había dejado sus opciones en nada. Al Compañía de María le queda hoy el último partido de la fase de ascenso. Lo jugará a las 12.00 horas contra el Burgos, un equipo que conoce muy bien a los colegiales ya que lo entrena el coruñés Ángel Galmán, cuyo padre, Fernando Galmán, era una de las almas del Liceo desde su puesto de mecánico, y que fue ayudante de Copa en el Cerceda.