El mar que baña la bahía coruñesa está poblado por todo tipo de seres, vivos o inanimados. Desde los peces y moluscos que moran en las profundidades a los barcos que navegan por su superficie. El domingo, cerca de cien extrañas y valientes criaturas tomarán la costa para hacer un recorrido que les llevará a través de diez kilómetros de la playa del Orzán hasta la ensenada del puerto herculino -si el tiempo y la alerta amarilla lo permiten-. Visten neoprenos negros. No son humanos. Ni tampoco anfibios. Mitad y mitad. Son hombres y mujeres que pasan tantas horas a remojo que prácticamente tienen escamas y branquias. Son nadadores.

Por quinto año consecutivo se repite el ritual de la Travesía de larga distancia de A Coruña. Y cada ocasión la invasión es más numerosa. Empezó con 25. Un lustro después la cifra se ha multiplicado por cuatro. El que la hace, repite. Algo tendrán las aguas herculinas para enganchar a tantas sirenas y delfines. Con espíritu competitivo o por puro placer. Unos nadarán para ganar, tanto la prueba como el circuito gallego de aguas abiertas, que se abrió y se cerrará con la Torre de Hércules como espectadora de lujo y después de once escalas. Otros, con el único objetivo de superarse y de medir su capacidad de esfuerzo. Diez kilómetros no los puede aguantar cualquiera. Terminar es la más honrada de las metas para lucir con orgullo la camiseta que dice: ¡Eu fíxena!

Entre los delfines, puede repetir el más rápido de 2011, Hugo Cardoso. Se trata de un ejemplar del Atlántico, pero de la zona de Portugal. Sin embargo, cada verano las corrientes lo acercan hasta la costa coruñesa, donde ya es el nuevo rey de San Amaro con cuatro coronas. Pero también será interesante el duelo entre Borja González Rodríguez (Pabellón Ourense) y Cristian Fernández Nieto (Galaico). El primero tiene 138 puntos en la general del circuito gallego, el segundo, 134. Tres victorias para ambos, aunque las dos últimas a favor del pontevedrés. El título está en juego.

Ya está decidido en categoría femenina a favor de Laura Pimentel, una sirena de río. Pero la ourensana quiere conseguir su tercer triunfo seguido en A Coruña para confirmarse como una de las promesas de las aguas abiertas tanto en Galicia como en España. Esta temporada estival lo ha ganado todo, a excepción de la Travesía del Puerto de San Ciprián, en la que le tocó descansar y no participar, y en la de Praia de Coroso, en la que fue segunda superada por una auténtica gacela del mar, María Vilas, toda una campeona de Europa júnior.

Sean de la especie que sean, estas extrañas criaturas que son los nadadores tienen en común su pasión por el agua y forman una gran familia. El sábado se reunirán para recibir las últimas instrucciones. El domingo a las 09.00 horas, empezarán su aventura.