No se cumplió ninguna de las premisas que necesitaba el Leyma Natura para soñar con su primera presencia en la Copa Príncipe. Ni los naranjas ganaron su encuentro en el derbi contra el Ourense ni sus rivales, Andorra, Palencia y Breogán -los dos primeros fueron los triunfadores de la jornada-, perdieron los suyos. Los coruñeses, pese a la derrota y a no alcanzar el objetivo, cierran la primera vuelta muy por encima de sus expectativas. Nueve triunfos, cuarto en la tabla y entre los aspirantes a todo. "Estoy muy orgulloso de este equipo", decía nada más finalizar el partido Tito Díaz. Ahora promete más guerra para 2014.

Los naranjas tienen acostumbrado a su público con duelos de infarto que no se deciden hasta los últimos instantes. Casi un pacto para que disfruten treinta minutos y sufran diez, con remontadas incluidas. Pero a veces cuando se juega con fuego uno se quema. Esta vez al Leyma le tocó la otra cara de la moneda, la de haber tenido el triunfo en su mano pero haberla dejado escapar al atacar con precipitación. El Ourense, que venía al Palacio de tapado, jugó a lo suyo y con un acierto descomunal en triples -14 de 28, un 50% lo mismo que los coruñeses, con 10 de 20- impidió cualquier atisbo de escapada local para rematar con más aplomo en las jugadas decisivas.

La superioridad en el inicio fue visitante, pero solo en el marcador. Los naranjas dominaban el rebote, pero entraron demasiado fallones. Eso propició que el Ourense consiguiera sus primeras ventajas mientras que el Leyma Natura no conseguía anotar de jugada hasta el minuto 4.12. Eso sí, fue un triple de Castro que anunciaba el festival que quedaba por venir. Además, el trabajo bajo tableros de Cabanas dio sus frutos cargando de faltas a los pívots rivales. Carter se tuvo que sentar y su equipo no marcó en los últimos 4.39 del cuarto. Con un parcial de 14-0 y tres triples -dos de Ogirri y uno de Ángel Hernández- los locales se sentaron a descansar con 19-14.

Hasta siete canastas desde la línea de 6.75 metros se anotaron en el segundo cuarto, cuatro para los visitantes y tres para el Leyma Natura. El marcador reflejó un tira y afloja durante los diez minutos. Los locales conseguían ligeras ventajas, pero el acierto exterior ourensano neutralizaba todos los intentos de escapada. Los pupilos de Tito Díaz aumentaron el nivel de defensa, obligando al rival a agotar los 30 segundos de ataque en dos ocasiones seguidas, pero dos jugadas sin anotar con los dos triples de respuesta situaron el 36-36. Sobre la bocina del descanso, Cain dio ventaja a los suyos con otro triple (41-38).

El encuentro se convirtió en un intercambio continuo de golpes en el que el Ourense tomó la iniciativa por primera vez desde el primer cuarto (43-45). También se encomendaron los coruñeses a los triples para mantenerse. Hernández y Herrero contrarrestaron otros dos de los visitantes y Cabanas impuso su dominio debajo de canasta, pero no era suficiente, aunque por lo menos consiguió impedir una brecha en el marcador (52-57). Los ourensanos afrontaron el última parcial con una ventaja de dos puntos (55-57). En el cuarto final el trabajo del Ourense fue excepcional, mientras que los coruñeses parecían atenazados por la presión. Reaccionaron a cuatro para la bocina, se pusieron a dos, pero una pérdida y una falta en ataque no les permitieron firmar una nueva gesta.