El italiano Paolo Tiralongo (Astana) ganó la novena etapa del Giro de Italia, entre Benevento y San Giorgio del Sannio, de 224 km., mientras que el español Alberto Contador (Tinkoff Saxo) sigue como líder, aunque cedió un segundo al italiano Fabio Aru (Astana), que ahora se sitúa a tres.

Tiralongo marcó un tiempo de 5h:50.31, seguido, a 21 segundos, por el holandés Steven Kruijswijk, mientras que el grupo de Contador cedió 56 segundos. El de Pinto sigue al frente de la general, por delante de Aru, que se situó a tres segundos, y el australiano Richie Porte (Sky), que está a 22.

Contador, a pesar de sus dolencias en el hombro izquierdo, aguantó sin dificultades aparentes la etapa, en la que un día más los componentes del Astana intentaron sorprenderle, pero el madrileño incluso marcó el ritmo en la ascensión al último puerto, el Passo de Serra, a tan una docena de kilómetros del final.

La jornada incluyó tres subidas. No eran excesivamente duras, pero el alto de Terminio, de segunda categoría, tenía 20 kilómetros de ascensión y desniveles de hasta el nueve por ciento. La carrera quedó rota en el kilómetro 70, cuando en cabeza estaban once corredores, entre ellos el canadiense Hesjedal, vencedor del Giro en 2012, el colombiano Betancur, el español Herrada y el holandés Slagter, que kilómetros después dejó a sus compañeros de fuga y se marchó solo en busca de la meta.

A unos 20 kilómetros para el final, el escapado seguía su galopada con dos minutos de ventaja sobre un grupo en el que estaban Betancur (AG2R), Tiralongo (Astana), Moinard (BMC), Elissonde (FDJ), Herrada (Movistar Team), Hesjedal (Cannondale-Garmin), Geschke (Giant-Alpecin) y Kruijswijk (LottoNL-Jumbo), mientras que el grupo principal de Contador marchaba a seis minutos. En el alto de Serra, el escapado echó el resto, había corredores intercalados que no terminaban ponerse de acuerdo y en el grupo principal se formó un cuarteto con Tiralongo y Aru, a los que seguían Contador y Porte.

En el descenso, Tiralongo alcanzó a Slagter y poco después lo dejó, mientras que en el grupo perseguidor Contador intentó dejar de rueda a Porte y Aru, que recibía el apoyo de su compañero español Mikel Landa. Fue una jornada en la que los corredores del Astana acapararon el protagonismo en los momentos clave y el trabajo lo remató Tiralongo.

Contador la superó sin mayores problemas tras la caída que sufrió el jueves, en la que se disloco el hombro izquierdo, y hoy tendrá un día de relativo reposo al ser el primero de descanso en el Giro 2015.