El Atlético de Madrid aceleró en todas las competiciones en un mes de triunfos, con seis victorias consecutivas desde el 8 de noviembre hasta ahora, con un solo gol en contra, con la condición del equipo más fiable en defensa de las grandes Ligas Europeas y con la subida al segundo puesto de la Liga.

El despegue de los rojiblancos se produjo en la jornada siguiente a su visita a Riazor, de donde se llevó un empate (1-1), en un partido en el que se adelantó en el marcador y que acabó equilibrando Lucas Pérez, tras robarle el balón a Giménez.

Y con el liderato del Barcelona a la vista. Ya lo tiene a dos puntos, la mitad de distancia que hace 28 días, cuando inició su racha de cuatro triunfos en el campeonato, en la que además ha ganado una posición, de la tercera a la segunda, con sólo una mala noticia: la lesión de Tiago.

La fractura de tibia en la pierna derecha del luso, que le mantendrá cuatro meses fuera de los terrenos de juego, es la única sombra del elevado rendimiento del conjunto rojiblanco desde el 8 de noviembre, cuando se impuso en el último instante al Sporting (1-0).

Después, superado un parón de dos semanas, le siguieron los triunfos contra el Betis (0-1), el Galatasaray (2-0), el Espanyol (1-0), el Reus (1-2) y el Granada (0-2), por ese orden, para reafirmar la evolución y el crecimiento del equipo madrileño, que no pierde un partido desde el 30 de septiembre: 1-2 contra el Benfica.

En todo ese tramo de seis victorias sólo ha recibido un gol, el que le marcó el Reus a Moyá el pasado martes. Oblak, el titular en la Liga y en la Liga de Campeones, ha encadenado 574 minutos sin recibir un gol, seis encuentros más en el tramo final del 1-1 con el Deportivo.

Y el Atlético es el equipo menos goleado de las cinco grandes Ligas Europeas, con seis tantos en contra en 14 jornadas; una media de 0,42 por partido, insuperable para el resto de clubes de las competiciones alemana, inglesa, francesa e italiana. Este sábado superó al Bayern Múnich, derrotado por el Moenchengladbach por 3-1.