El Valencia Basket se ha impuesto al Real Madrid (87-86) en el cuarto partido de la semifinal de la Liga Endesa tras un emocionante partido resuelto con una canasta del base Guillem Vives en los últimos segundos de la prórroga. De esta forma, la serie queda en 2-1 para los blancos, a la espera de la disputa del cuarto partido.

El equipo valenciano, que no podía contar con Rafa Martínez tras lesionarse en el primer encuentro, perdió en el primer cuarto a John Shurna y en el segundo a Antoine Diot, pero, espoleado por el apoyo de la Fonteta, supo sobreponerse a esas bajas y sumar su primer triunfo de la serie pese a la gran labor de Rudy Fernández y Andrés Nocioni para el Real Madrid en el tramo final.

Pedro Martínez apostó por un quinteto inicial con dos aleros y el Real Madrid le copió para no ceder la iniciativa física, pero si en los locales fue uno de ellos, Fernando San Emeterio, el que tiró de los suyos, en los visitantes fueron dos triples de Sergio Rodríguez los que les impulsaron.

Con el choque igualado, una contundente falta de Jonas Maciulis a John Shurna acabó con una aparatosa caída del estadounidense, que se lesionó el codo derecho y tuvo que abandonar el partido y ser trasladado a un hospital.

Este nuevo golpe acabó de enrabietar a los locales, que aumentaron su dureza en ambas canastas y, comandados por Sato y Lucic, llegaron al final del primer cuarto con una meritoria ventaja (25-19, m.10).

Superado por el despliegue físico de su rival, el Real Madrid cambió de estrategia y apostó por un quinteto más pequeño y más rápido y Sergio Llull se las arregló para, con sus propios puntos y los que generó, igualar el marcador en apenas unos minutos (32-32, m.15).

Los problemas del Valencia se multiplicaron pues en ese momento Diot, que era duda por problemas musculares y que había jugado cinco minutos, comunicó al cuerpo técnico que no podía volver a entrar a la pista.

Dos triples casi consecutivos de Rudy Fernández y la tercera personal de Hamilton parecieron noquear al Valencia, pero una técnica al mallorquín, el buen trabajo del hasta entonces inédito Trias, la casta de Sato y un par de acciones más de Lucic le permitieron volver a dar la vuelta al choque (47-45, m.20).

Ambos equipos regresaron acelerados a la pista y el choque se convirtió en un carrusel de fallos con un par de triples aislados por cada bando. Pero el regreso a la pista de Dubljevic obligó a los visitantes a multiplicar la atención sobre él y el montenegrino supo absorber esa atención para liberar a San Emeterio y que el cántabro exhibiera recursos y liderazgo para abrir brecha (61-52, m.28).

De nuevo volvió a apostar Pablo Laso por una tripleta exterior más pequeña y aunque otra técnica a Llull, que fue su quinta falta, pareció cortarle el ritmo, con una gran defensa de Gustavo Ayón y de la mano de Rudy Fernández y de Nocioni volvió a ajustar el encuentro a cinco minutos del final (67-66, m.35).

Confiando a ambos su ataque, el equipo de Pablo Laso consiguió ponerse por delante, pero el Valencia se resistió y con un inmenso Sato volvió a empatar a falta de apenas un minuto (74-74, m.40) y una nueva sucesión de errores en ambas canastas llevaron el choque a la prórroga.

Cinco puntos consecutivos de Rudy Fernández en el primer minuto del tiempo extra dieron al Real Madrid la iniciativa en el tiempo añadido pero nuevamente el Valencia se revolvió y consiguió empatar a falta de dieciséis segundos.

Felipe Reyes falló uno de los dos tiros libres de los que dispuso y Vives se recorrió la pista y, aunque estuvo a punto de perder el control de la pelota, logró rehacerse y anotar casi desde el triple una canasta que supuso el triunfo de su equipo.