El alemán Marcel Kittel (Etixx) abrió su cuenta en Limoges al imponerse en un apretado sprint que precisó de foto de llegada en la cuarta etapa, la más larga de la presente edición, de 237,5 kilómetros, en la que el eslovaco Peter Sagan (Tinkoff) mantuvo el liderato y los favoritos pasaron página sin cambios ante la primera etapa de media montaña.

Kittel, el gigante de Arnstadt hizo una demostración de fuerza en la recta de llegada. En un sprint largo, primero superó a Kristoff (Katusha), el primero en lanzarse, y luego aguantó el acoso de Coquard, aunque solo fuese por un milímetro. El ciclista galo se quedó de nuevo a las puertas de la victoria.

En una jornada que se cerró con un tiempo de 5h.28.30, a una media de 43,2 kms/hora, los favoritos evitaron percances ante el primer examen de hoy. A la prueba llega de amarillo Peter Sagan, con 8 segundos sobre el francés Julian Alaphilippe (Etixx) y 10 respecto a Alejandro Valverde (Movistar). En zona noble Chris Froome y Nairo Quintana se mantuvieron a 14 segundos del líder y Alberto Contador, a 1.02 minutos.

La etapa maratón del Tour cumplió con el guión previsto: escapada, persecución controlada y locura final con la actuación estelar de los velocistas. Esta vez los encargados de abrir el foco de atención salieron al poco de producirse la salida en Saumur. La cabalgada de 237 kilómetros, esta vez con sol y buena temperatura, no asustó al español Markel Iriziar (Trek), al joven francés Gougeard (Ag2r), que esta temporada ha cubierto en total más de 1.000 kilómetros en escapadas, al belga Naesen (IAM) y al alemán Schillinger (Bora).

El pelotón no se echó a temblar precisamente por el calado de la fuga, pero tampoco se tomó el día a ritmo de paseo. Esta vez la media superaba los 40 por hora, y hasta los sprinters se picaron en el paso por el sprint intermedio de El Dorat.

Todo fue cuestión de tiempo y el Lotto de Greipel puso al pelotón en fila. Por delante el cuarteto menguó con la entrega prematura de Gougeard, y los tres restantes tiraron la toalla. El Katusha quería celebrar con victoria el 29 cumpleaños de Kristoff y marcó el ritmo de aproximación. El Tinkoff se mostró insaciable con Sagan, y hasta el Sky y Movistar se dejaron ver por cabeza hasta 3 kilómetros de meta.

Luego, se echaron a un lado. Kristoff fue el primero en arrancar a 200 metros de la línea de meta, Kittel se pegó a rueda y ganó la posición. Entonces apareció Coquard. Ambos se rozaron con los hombros y provocaron que la tecnología decidiera el ganador. La foto eligió a Kittel. Novena victoria en el Tour, que las une a las 4 del Giro y una en la Vuelta.

Hoy se disputa la quinta etapa entre Limoges y Le Lioran, de 216 kilómetros, recorrido de media montaña con 6 puertos puntuables, 4 de ellos en los últimos 50 kilómetros. Día para cazaetapas y tal vez para que los favoritos salgan a escena de nuevo.