Alberto Seoane se debatía ayer entre la alegría y la tristeza. Un día después de caer eliminado en cuartos de final en los Juegos Paralímpicos de Río, el coruñés cree que lo logrado "cumple con las expectativas", pero buscaba la medalla "y quedarse tan cerca después de remontar un 2-0 es una pena". "Di la cara, luché hasta el final y estoy muy contento. Primeros Juegos y diploma olímpico", reflexiona. Ahora, repone fuerzas para afrontar la competición por equipos junto a Álvaro Varela y Jordi Morales que empezará el miércoles. "Lucharemos para sacar lo mejor", afirma.

El principal aval para Seoane es conocer que está en un buen momento. Lo demostró ante el número tres del mundo, el tailandés Rungroh Thainiyam en cuartos de final. "Empecé perdiendo 2-0, pero estuve en todo momento tranquilo, sabiendo lo que tenía que hacer y muy concentrado. No me vine abajo", analiza. "En el primer set él fue bastante mejor que yo, tuve problemas para devolver su servicio. A partir del segundo ya fue mejor. Busqué mi mejor juego con la derecha, que es mi mejor golpe, ataqué, me moví bien y llegué al 2-2. No empecé bien en el quinto, tenía que haber sido más agresivo. Se puso 8-2, pero seguí luchando hasta el final. Me acerqué en el marcador pero cayó de su lado con un punto largo, muy bonito y muy bien jugado por los dos que si llega a ser para mí... hubiese cambiado la cosa", continúa.

El jugador herculino está muy agradecido con el apoyo del público brasileño: "Es una experiencia súper bonita de vivir, además vinieron mis padres a verme jugar". También con el que le llega desde A Coruña. "Con todos los ánimos sabía que tenía que luchar al máximo, darlo todo para no tener nada que reprocharme. Y así lo hice".