El Liceo se bloqueó. La única que entendió la intensidad que pedía un partido en el que había en juego una plaza para la Copa de la Reina fue Nuria Novoa. La veteranía le dio un punto extra de agresividad, atrevimiento, ganas y descaro que no tuvieron sus compañeras. El Las Rozas superó en todo a las verdiblancas con mucha facilidad. El conjunto madrileño, con cuatro internacionales -la argentina Laura Jara, la chilena Pancha Hidalgo y las italianas Giulia Galeassi y Pamela Lapolla- fue más maduro táctica y físicamente. Y tuvo la eficacia necesaria para sacar provecho de casi todas sus oportunidades. Al Liceo, en cambio, no le salió nada y poco a poco fue desesperándose ante su mala suerte. Tuvo sus ocasiones antes de que las visitantes se marcharan en el marcador. Pero le faltó tomar mejores decisiones en los metros finales para haber conseguido algún gol con el que cambiar el rumbo del partido.

De todos modos, el destino de un encuentro a veces se escribe en tan solo cinco segundos. Pudo cambiar todo si el Liceo se hubiese adelantado. Y no pasó por unos centímetros, con una ocasión clarísima tras una buena jugada en los primeros compases del encuentro. Ahí la diferencia. Porque el Las Rozas no perdonó la primera que tuvo. Las dos italianas diseñaron la estrategia. Lapolla asistió y Galeassi remató. Una lección de juego detrás de la portería y de que menos es más. La sencillez por encima de todo. Con el 0-1 todavía había esperanza, pero según pasaban los minutos el equipo madrileño se iba encontrando más cómodo. Muy cerrado atrás, hizo que el Liceo no encontrara el hueco. Y cuando lo hacía, le costaba tirar a puerta. Después de casi todo el primer tiempo sobre una misma portería, Sonia Rodríguez sentenció a la contra el 0-2 con un disparo cruzado. Demasiado castigo.

Si parecía excesivo el resultado según lo visto en los primeros veinte minutos, el 0-5 final hizo justicia. Porque la segunda parte fue para el Las Rozas, por más que el Liceo tuviera atisbos de reacción. Fue uno de esos días en los que no sale nada. Ni Katy Guscin pudo desplegar sus habituales paradas. En el tercero poco pudo hacer. Tres pases para que Galeassi culminara un nuevo contragolpe. Pim, pam, pum. Así de fácil mientras las coruñesas se estrellaban una y otra vez contra la muralla madrileña. Siempre un punto por detrás, el guión incluyó dos goles más, uno de Claudia Silva que se le coló a la portera y el tercero de Galeassi, que en el último minuto cerró el 0-5 de falta directa.

Mal final de año para el Liceo, pero el 2016 ha dejado muchas cosas buenas. Debutó en la OK Liga femenina y poco podían confiar llegar a este punto con 15 puntos y luchando por la Copa de la Reina. Manlleu, Cerdanyola y Mataró le esperan a la vuelta.