Al Leyma Coruña le toca dar una paso adelante hoy. Visita la cancha de un Palencia (21.00) que ocupa la cuarta plaza de la clasificación y ha hecho de su casa un fortín, en el que ha ganado diez de los trece partidos disputados ahí.

Es la hora de la verdad para los naranjas. Primero porque juegan lejos de Riazor y saben de la importancia de sumar a domicilio. También porque necesitan demostrar -a ellos y a la afición- que el crecimiento de las últimas semanas es real y que la adaptación de Justin Johnson y Kyle Rowley es ya un hecho. Además, su técnico Tito Díaz confirma que están "en un buen momento". "Veo al equipo creciendo y vamos a tratar de aprovecharlo en Palencia", comenta, y añade sobre los recién llegados: "Los dos están aportando mucho y nos hacen volver a ser un equipo fuerte en todas las posiciones".

Saben los coruñeses que deben hacer hoy "un gran partido" para tener opciones de llevarse el triunfo, que sería el tercero consecutivo tras superar en semanas anteriores a Burgos y Cáceres. Además de fortalecer su defensa, el Leyma deberá prestar una atención especial al rebote, una faceta que suele dominar su rival.

Tito Díaz avisa del potencial de la plantilla palentina, con Dani Rodríguez como timón y con Romà Bas y Marc Blanch lanzados al ataque. El último, muy aficionado a jugársela desde la línea de 6.75.

El Palencia tropezó la semana pasada en la pista del Melilla, lo que ha minado sus fuerzas en esta recta final. Tratarán de animarse esta noche con su hinchada como sexto jugador, pero a los naranjas nunca les tiembla el pulso, ni siquiera en un ruidoso pabellón.

El entrenador lucense llega a esta cita optimista, confía en unos jugadores que "están compitiendo y entrenando bien", por lo que no duda que darán la cara una vez más. "El buen ambiente del vestuario" es clave en estos partidos en los que la tensión es un factor más del juego.