Rafa Nadal se deshizo este martes de su compatriota Fernando Verdasco en la tercera ronda de Indian Wells, primer Masters 1.000 de la temporada, por 6-3 y 7-5 en una hora y 30 minutos.

Nadal se enfrentará en octavos de final al suizo Roger Federer, quien doblegó al estadounidense Steve Johnson por 7-6(3) y 7-6(4) en una hora y 34 minutos.

El ex número uno del mundo mostró una versión sólida y agresiva, que se hizo especialmente palpable en una primera manga en la que exhibió una gran confianza en su 'drive' y seguridad desde el fondo de la pista. Rompió el servicio a su rival con un juego en blanco para el 5-3 y se anotó el set en 31 minutos.

Rápido de piernas y capaz de llegar a los exigentes golpes de su contrincante, vio cómo Verdasco cedió su saque en el tercer juego del segundo set tras una doble falta (2-1), pero reaccionó de inmediato y lo recuperó con un juego en blanco.

Sin embargo, en el momento clave, Nadal no dejó pasar una segunda bola de 'break' y se anotó el 6-5. Con su servicio dominó y rubricó la victoria con un cruzado inapelable.

Este resultado deja los emparejamientos directos entre ambos tenistas en una marca de 16-3 a favor de Nadal.

La última victoria de Verdasco sobre el de Manacor llegó en el Abierto de Australia del año pasado. El desierto californiano también les enfrentó en 2016 con victoria de Nadal por 6-0 y 7-6 (9).

Muguruza, a cuartos de final

Por su parte, Garbiñe Muguruza accedió a cuartos de final tras vencer a la ucraniana Elina Svitolina por 7-6(5), 1-6 y 6-0 en una hora y 53 minutos.

Su próxima rival será la tenista número tres del mundo, Karolina Pliskova, que se clasificó tras una lesión sufrida por Timea Bacsinszky cuando la checa iba ganando por 5-1 en el primer set.

El notable encuentro de la hispano-venezolana arrancó con un 5-2 a su favor que, justo después, dio pie a cuatro juegos consecutivos para la ucraniana, que llegó a colocarse con 5-6 para caer finalmente en la muerte súbita.

Muguruza se recompuso a tiempo pero perdió la concentración por completo en la segunda manga, donde su rival se impuso con 14 golpes ganadores y únicamente dos errores no forzados.

En el descanso entre el segundo y el tercer set, hizo acto de presencia Sam Sumyk, el técnico de Muguruza, a quien se le pudo escuchar por televisión las indicaciones que daba a la española: "Va a ser un set largo. Haz ajustes. Vas a ganar si creces en tu juego".

La tercera manga no fue larga, pero Muguruza creció de forma exponencial en su juego. Registró una rotura de saque con un magnífico revés que le colocó con 2-0, consolidó su servicio y pisó el acelerador hasta la traca final.