Las Palmas y Villarreal abren hoy una nueva jornada de LaLiga en un partido en el que el juego de fantasía de los isleños se medirá a la mejor defensa del campeonato, la del conjunto castellonense, que no pierde como visitante desde noviembre.

El equipo canario, fuerte en casa y endeble fuera, ha acumulado una suma de puntos que le permiten afrontar el último tramo con tranquilidad, aunque no haya asegurado aún de forma matemática la permanencia.

El técnico cántabro recupera a Roque Mesa y a Livaja. La vuelta de Roque devolverá a su posición de central a Lemos, siempre y cuando el entrenador no opte por las rotaciones con los que suele sorprender, como hizo en la portería en el último partido con Raúl Lizoain, quien podría repetir bajo los palos.

El Villarreal llega a este partido en uno de sus mejores momentos de la temporada, al acumular cinco victorias de los últimos seis partidos jugados.

A ello se suma que lleva ya cuatro meses sin perder como visitante, lo que supone estar siete jornadas seguidas con resultados positivos, lo que supone que el Villarreal llegue a esta recta final con aspiraciones de alcanzar la cuarta plaza y con el objetivo prioritario de asegurar una plaza europea.

Fran Escribá seguirá contando con las bajas de los lesionados Sergio Asenjo, Adrián López y Denis Cheryshev, que siguen fuera del equipo, a los que se ha unido a última hora Roberto Soldado, mientras que el delantero Bakambu ha entrado en la citación tras recuperarse de unas molestias.