Hace tres veranos que Noelia García hizo las maletas y se marchó a Madrid, decidida a darse una oportunidad en la halterofilia. Era como quien dice una novata que acababa de iniciarse en el Club Halterofilia Coruña, fuente inagotable de talentos, en el arte de levantar pesas. Pero en la Federación Española vieron algo en ella. Y la dura disciplina del Centro de Alto Rendimiento empieza a dar sus frutos. En 2016 debutó con la selección española y se quedó a las puertas del podio en el Campeonato de Europa júnior, clasificándose también para el Europeo absoluto. Y esta temporada eleva el listón con su participación en el Campeonato del Mundo júnior que se disputará en Tokio y en el que busca el top diez en su categoría, la de menos de 53 kilos. Ayer comenzó su largo viaje de 25 horas a Japón. Está previsto que compita el domingo.

"Para mí el objetivo es intentar quitarme una espina y levantar por fin 80 kilos en arrancada y 93 o 95 en dos tiempos", afirma decidida, todavía sin nervios. "Otra cosa será el día que me toque competir, ahí sí que ya estaré pletórica", aclara. En puestos, se fija clasificarse entre las diez mejores. "Es difícil, pero vamos a intentarlo", añade. El mayor hándicap será el cansancio ya que tiene que recorrerse medio mundo para llegar a Tokio. "Cuando me dieron el billete y empecé a contar horas... ¡vaya bajón! Llegaré reventada, con solo ganas de descansar y dormir. Pero una vez puesta en faena ya pasará todo. La verdad es que es emocionante ir a Japón. No todo el mundo tiene esa oportunidad", dice.

Ahora ya tiene experiencia, no como en el Europeo júnior del año pasado, con una cuarta posición que le dejó un sabor agridulce. "Me quedé contenta porque era mi primera competición internacional. Pero la medalla era mía, pero en mi último movimiento en arrancada levanté 75, pero los jueves me lo dieron nulo porque no coloqué bien un hombro, así que el bronce se lo llevó la que lo hizo antes que yo", recuerda. Al Mundial llegará tras colgarse la plata en el Campeonato de España absoluto que se disputó durante el fin de semana en A Coruña. "Dentro de lo que cabe fue un buen resultado porque no era un campeonato para tirar fuerte. Me lo tomé como un entrenamiento más previo al Mundial, así que salió bien", valora. Espera que su nombre siga sonando en la halterofilia española mucho tiempo. Empezando por una gran actuación el domingo en el Mundial.