El Valencia Basket cumplió el sueño de su vida y se proclamó campeón de la Liga Endesa al derrotar al Real Madrid en el cuarto encuentro de la final, en el que arrolló al equipo blanco en el segundo cuarto y tuvo la madurez suficiente para resistir el largo asedio de su rival que le obligó a sufrir para convertirse en un grande del baloncesto español.

Pese a la histórica oportunidad que tenía delante, el Valencia inició el choque con relativa calma. Y eso que el Madrid protagonizó una solvente puesta en escena con su cinco inicial reforzado con Reyes y Taylor. Pero la presencia de San Emeterio, el trabajo de Sikma, las asistencias de Dubljevic y los puntos de Sastre le permitieron hacerse con el choque.

El Madrid lo intentó de la mano de Llul, pero el Valencia no se vino abajo. Un triple de Romain Sato y los rebotes de Sikma y Dubljevic dieron vida a los locales y un palmeo del centroafricano hizo enloquecer a la Fonteta.