El Getafe ganó 3-0 al Huesca y jugará la final de las eliminatorias por ascender a Primera División después de superar un partido farragoso, con muchas interrupciones y con acciones feas que embarraron un duelo que se llevó con claridad el conjunto madrileño.

Después del 2-2 del choque de ida, en el que el Getafe desperdició una ventaja de dos tantos cuando quedaban 15 minutos para el final, el Huesca, envalentonado por el heroico empate que consiguió al final, se citó ante la historia con muchas ganas.

El Huesca tenía la obligación de salir a marcar por lo menos un tanto. El Getafe, uno de los gallos de la categoría, podía afrontar el encuentro con más tranquilidad.

En la primera parte, muy táctica y deslucida por las continúas faltas de ambos equipos, apenas hubo oportunidades. Salvo dos acercamientos por una banda de Samu Saiz y de Akapo para el Huesca, las verdaderamente importantes fueron para el Getafe.

Y las consiguió de la única manera posible, a balón parado. Era la única opción por los continuos parones que sufrió el choque. Y, en una de ellas, en el minuto 37, acertó Juan Cala para abrir el marcador. El Huesca tenía que marcar dos goles para clasificarse y, al contrario que en el encuentro de ida, no lo logró. El Getafe que se centró en sentenciar la eliminatoria y lo consiguió con los tantos de Pacheco, con un disparo desde fuera del área, y de Álvaro Fuster, que cumplió en un mano a mano. El 3-0 acabó con todo y el Getafe peleará por la plaza que queda en Primera.