La selección española masculina de waterpolo abrió ayer su participación en el Mundial de Budapest encajando una derrota por la mínima ante Grecia (7-8), rival que siempre llevó la iniciativa en el Complejo Hajes Alfred de la capital húngara, pero que tuvo que pelear hasta el final por asegurar la victoria. Igual que ocurrió el año pasado en el Europeo de Belgrado y en los Juegos de Río, Grecia se impuso a España.