Oro y récord del mundo de 400 estilos. Mireia Belmonte coge carrerilla en su periplo por las distintas etapas de la Copa del Mundo en piscina corta. Empezó despacio, sin actuaciones brillantes, pero con buena letra y medallas. Y según han ido pasando las semanas, ha ido claramente a más. Ella es una nadadora de fondo. El viernes ya deslumbró en Eindhoven con dos oros en menos de una hora y ayer explotó con un récord del mundo de otro planeta. Se lo arrebató, de hecho, a la húngara Katinka Hosszu, una de esas estrellas de la natación mundial. La conocida como Iron Lady fue segunda, pero a años luz de Belmonte, que con sus 4.18.94 se sitúa en lo más alto de la tabla de registros de todos los tiempos.

La prueba de la Copa del Mundo de la localidad holandesa de Eindhoven se está convirtiendo en talismán para la española. Allí fue su estreno a nivel internacional absoluto en 2008, ya hace nueve años. Con un oro en 200 estilos y un bronce en 200 mariposa consiguió sus primeras medallas en piscina larga en categoría absoluta y confirmaba las grandes esperanzas puestas en ella, aunque tendría que esperar otros cuatro años más para vivir su explosión definitiva en Londres 2012 con las platas en 200 mariposa y 800 libres. Lo que siguió fue historia de la mejor nadadora española, tanto en categoría masculina como femenina, de la historia.

Mireia Belmonte se impuso en la final con una marca de 4.18.94, por delante de la hasta ayer plusmarquista mundial de la distancia, la húngara Katinka Hosszu (4:25.18), y la estadounidense Ella Eastin (4:26.06). La nadadora española mejoró los 4:19.46 establecidos por Hosszu el 2 de diciembre de 2015 en Netanya (Israel). La húngara, triple campeona olímpica en Río 2016, fue la campeona del mundo en Budapest tanto de 200 como de 400 estilos y se colgó el bronce en 200 mariposa y la plata en 200 espalda.

La badalonesa protagonizó una espectacular remontada en la que superó a la húngara, que dominó la prueba en su primera mitad dado sus especialidades de mariposa y espalda. Braza y crol fueron para Belmonte, que no se conformó con superar a Hosszu e imparable, fue a por su quinto récord del mundo en piscina corta -tiene los de 400, 800 y 1.500 libres, 200 mariposa y 400 estilos- y su tercera medalla en Eindhoven, las tres de oro.