El Athletic de Bilbao apela a su historia para conseguir una plaza en la Liga de Campeones. Es el desafío que tiene el grupo de Ziganda, el entrenador que realizó una brillante temporada en el filial y que ocupa el lugar que dejó Ernesto Valverde, fichado por el Barcelona. El equipo vasco no ha sufrido muchas variaciones con respecto a la temporada pasada y volverá a la filosofía del buen juego y a confiar en su estadio como talismán para conseguir sus objetivos. Uno de los puntos de referencia será Aduriz, el delantero de 36 años que mantiene un alto nivel de juego. Sin embargo, su fuerte carácter es uno de sus grandes problemas. El Athletic de Bilbao confía en estar en la lucha con los grandes.