El Barcelona sumó ante el Las Palmas, en un Camp Nou cerrado al público, el pleno a siete victorias en LaLiga Santander, en un encuentro en el que el equipo azulgrana reaccionó en el segundo tiempo con los tantos de Sergio Busquets y, en dos ocasiones, de Leo Messi.

Tras unos primeros 45 minutos muy igualados, el líder de la competición despertó a tiempo en el segundo tiempo, gracias en parte a la entrada de Iniesta y Rakitic, y resolvió un partido marcado por lo sucedido en Cataluña.

Silencio en el Camp Nou, algo que jamás había sucedido en la historia contemporánea del templo azulgrana. Lo acontecido en Cataluña provocó que la junta directiva de la entidad catalana decidiera, finalmente, jugar el encuentro a puerta cerrada.

En un estadio en el que el único ruido ambiental fueron los gritos de los jugadores y las instrucciones de los técnicos, el duelo empezó con el Barcelona dominando el primer cuarto de hora, si bien no generó muchos problemas al cuadro de Pako Ayestarán, que se estrenaba en el banquillo amarillo.

Sin Iniesta ni Rakitic en la medular, apostó Valverde por un centro del campo inusual con Busquets comandando las operaciones y Paulinho y Denis buscando conectar con Messi, Suárez y Aleix Vidal, el tridente atacante.

No obstante, el jugador más activo en los primeros minutos fue Sergi Roberto. Situado como lateral, el polivalente jugador se inventó el primer disparo peligroso que Chichizola resolvió.

A pesar del dominio azulgrana, Las Palmas no sufría demasiado en defensa y, cuando podía encadenar cuatro toques seguidos, llegaba con facilidad al área azulgrana.

Tras la reanudación, Valverde reaccionó y dejó a Paulinho y a Aleix Vidal en el banquillo. Y entraron Iniesta y Rakitic. El objetivo: recuperar el control del balón.

Lo consiguió el Barcelona que, con una marcha más, asedió la portería visitante. Avisó Messi con un lanzamiento de falta que rechazó Chichizola. Volvió a aparecer la mano salvadora del argentino evitando el gol de Rakitic tras un potente derechazo. A la tercera fue la vencida y en la salida de un córner, picado por Messi, Busquets abrió la lata con un sutil cabezazo.

Messi no perdonó, al fin, en el minuto 71 y dejó el partido encarrilado. Con el Las Palmas rendido, Messi sentenció en el 76 con una jugada que empezó en la zona ancha tocando para Iniesta, que encontró a Suárez y el uruguayo cedió en la frontal para el rosarino que definió con un disparo raso.

En un encuentro silencioso y extraño, el Barcelona consiguió culminar uno de los objetivos de Valverde: sumar 21 puntos de 21 posibles en LaLiga Santander en un primer tramo de calendario más accesible que el de sus rivales.