Rafa Nadal continuó con su racha de imbatibilidad y derrotó al croata Marin Cilic (7-5 y 7-6) en las semifinales del torneo de Shanghái (China), octavo y penúltimo Masters 1.000 de la temporada, en un exigente partido que le dio acceso a su décima final del año, en la que buscará el título ante Federer.
El de Manacor arrancó con una marcha más que el croata. Las bolas de break fueron cayendo desde el primer juego, pero Nadal bajaba sus prestaciones en estos momentos, algo impreciso al resto.
Las opciones de ruptura desaprovechadas por el balear, subieron la moral del superviviente Cilic, cada vez más cómodo sobre la pista y con menos problemas al servicio. La frustración de Nadal hizo el resto, y con 5-4 arriba, el tenista de origen bosnio gozó de dos bolas de set al resto. Sin embargo, una derecha a la red y un gran saque devolvieron la tranquilidad al español.
Con el agua al cuello, el número uno recuperó su mejor versión y sacó adelante un juego en el que Cilic dispuso de una tercera opción para apuntarse el primer parcial. En una película cuyo argumento se conoce de memoria, Nadal se hizo fuerte en la debilidad y consiguió quebrar el servicio rival en el juego posterior para cerrar con su saque la primera manga.
Con 5-5 en el marcador, Cilic salvó un comprometido 0-40 pero terminó perdiendo su saque debido al empuje de Nadal. En el turno de servicio posterior, dispuso de una bola de partido, pero Cilic arriesgó con la derecha y consiguió volver a equilibrar la contienda.
En el decisivo tie break, Cilic siguió arriesgando con sus golpes, pero esta vez la moneda salió cruz, y la mayor consistencia de Nadal fue argumento suficiente para cerrar el exigente encuentro en 2 horas y 11 minutos, y acceder a su décima final del año.
El español, que suma 16 victorias consecutivas tras las conseguidas en Nueva York y Pekín, buscará su séptimo título de la temporada ante el número dos del mundo, Roger Federer.
El genio de Basilea tuvo que ponerse el mono de trabajo y remontar el set inicial para derrotar en tres mangas (3-6, 6-3 y 6-3) a un combativo Del Potro que no acusó las molestias en su muñeca.
La final del torneo chino será el cuarto enfrentamiento de la temporada entre las dos raquetas más laureadas de la historia en lo que a Grand Slams se refiere. En los tres anteriores, incluyendo las finales de Australia y Miami, la balanza se decantó del lado suizo.
