La desembocadura del río Tajo en Lisboa será el escenario esta tarde de la segunda regata costera de la Volvo Ocean Race, la vuelta al mundo a vela con escalas, en la que el Mapfre aspira a sumar una nueva victoria como en Alicante.
La flota de las siete embarcaciones se enfrentará de nuevo a un recorrido entre boyas de unos 60 minutos de duración con un campo de regatas situado frente a la ciudad lisboeta, meta de la primera etapa que conquistó el Team Vestas.
Según los partes meteorológicos, todo parece indicar que las condiciones permitirán a los participantes a ofrecer todo un espectáculo en la desembocadura del río Tajo gracias a un viento del Suroeste que rozará los 20 nudos de intensidad.
"El miércoles tuvimos la regata de entrenamiento y los resultados fueron muy parecidos a los de la costera de Alicante. Hay equipos que llevan un poquito más de tiempo y todavía están marcando un poco la diferencia, pero esto se irá igualando y al final acabaremos todos al mismo nivel", afirmó el patrón Xabi Fernández en declaraciones facilitadas por su equipo.
El vasco se refirió a la costera como una regata con "un recorrido corto y muy intenso". "Daremos tres o cuatro vueltas y nuestra prioridad es la misma que en todas las regatas costeras: cuidar el barco, el material, las velas... Asegurarnos de que no tocamos el suelo y no dañamos el barco, y luego por supuesto intentar ganarla porque es bueno para todos", se sinceró.
Por su parte, Joan Vila cree que tendrán "bastante más viento" que en el entrenamiento. "Así que va a ser muy divertida. Obviamente nos decantamos más por cuidar el material porque sería desastroso tener un problema de material que arrastraríamos durante toda la vuelta al mundo", advirtió.
Pero si hay algo que caracteriza a la regata de Lisboa es, sin lugar a dudas, el hecho de disputarse en la desembocadura del río Tajo.
