La UD Las Palmas volvió a ganar un partido 77 días después al imponerse con un gol de Calleri a un decepcionante Betis, dirigido por el extécnico local, Quique Setién, un rival que solo compitió tras el descanso, pero lejos de tener opciones de puntuar.

Las Palmas disfrutó de una primera mitad plácida, en gran medida por la actitud pasiva de un Betis sin alma, que llegó tarde siempre y que apenas pisó el área canaria, sin exigir a la defensa más goleada del campeonato.

Los isleños no tuvieron dificultad en amasar la pelota, en jugar al pie, en acumular pases, sin mucha profundidad, pero con una comodidad impropia para un choque en el que tanto estaba en juego.

Sabedor como nadie del estilo Setién, la Unión Deportiva presionó arriba en los primeros minutos y los errores en defensa de los verdiblancos comenzaron a sucederse. Adán salvó un disparo de Rémy después de un fallo propio.

Un despiste de Durmisi propició que Tana pasara a Calleri y que el argentino batiera a Adán en el mano a mano, aunque el portero llegó a tocar el balón.

Cristian Tello y Sergio León, en disparos rasos que se marcharon cerca de los palos, tuvieron las mejores opciones de un Betis al que le resultó insuficiente su tímida reacción del segundo tiempo.