Los jugadores del Liceo no se cansan de decirlo y de pedir el apoyo del público en todas sus intervenciones públicas y en las redes sociales, pero la afición no se acaba de enganchar e ir en masa a los partidos en el Palacio de los Deportes de Riazor, que ha acusado bajas entradas a lo largo de lo que va de temporada. Algunos horarios no fueron los mejores, ya que el inicio de la competición europea implicó jugar entre semana y por la noche. El cambio del sábado al domingo, intentando no competir con otras ofertas deportivas de la ciudad, tampoco salió bien porque coincidió con el horario de varios partidos del Deportivo. El domingo hay una nueva oportunidad para ir a ver jugar al líder de la OK Liga. El Liceo recibe al Vic a las 12.30 horas en el último partido del año en casa, ya que la próximo semana cerrará 2017 en Lleida. Los verdiblancos buscan un último empujón para entrar en 2018 con ventaja en lo más alto de la clasificación.