Jonathan Viera falló un penalti en el minuto 95 y la UD Las Palmas no pudo culminar una remontada ante el Espanyol, que se llevó un punto del estadio de Gran Canaria (2-2) gracias a su excelente primer tiempo, en el que fue muy superior y que terminó 0-2.

El equipo isleño, sorprendido por el planteamiento del Espanyol y tanto tráfico de jugadores por la zona central, se vio obligado a jugar al contraataque, aunque fue el primero en crear peligro con un disparo del argentino Calleri que rechazó Pau López.

Al Espanyol le habían faltado ideas para someter a un rival que suele hacer aguas en defensa, hasta que Víctor Sánchez filtró un buen pase a Leo Baptistao, cuya posición habilitaba Bigas, y el brasileño se plantó solo ante Lizoain para regalar el gol a Gerard Moreno. Ese tanto hizo mucho daño a Las Palmas, que solo reaccionó a fogonazos, cuando su adversario bajó la concentración y le dejó combinar más de dos toques.

Cuando parecía que los amarillos empezaban a competir, Sergio García hizo una maravillosa maniobra técnica dentro del área, controlando un balón picado por David López, y, tras quebrar a Dani Castellano, asistió en el segundo palo a Gerard Moreno, que desempaquetó el segundo regalo que le hicieron sus compañeros.

El propio Gerard, en el último minuto de la primera parte, perdonó el tercer gol visitante con un disparo desviado, casi un penalti en movimiento, entre un clamor de protestas de los aficionados en el estadio de Gran Canaria y gritos de "(Miguel Ángel) Ramírez vete ya", dedicados al presidente del club.

El descanso fue lo mejor que le pudo pasar a Las Palmas para intentar empezar un nuevo partido, eso sí, contracorriente. Pese a la cómoda ventaja del Espanyol, el desenlace del encuentro estaba en un posible tercer gol del equipo catalán, perdonado en varias ocasiones porque la defensa de Las Palmas se desmadejaba con suma facilidad, o en el primero del equipo local, que logró, pero fue anulado por fuera de juego de Calleri (minuto 68).

El conjunto catalán estuvo más contemplativo en el último cuarto del partido y le dio una vida extra a la Unión Deportiva para marcar un tanto que le metiera en la pelea. Y lo hizo Rémy, de volea, tras un centro de Toledo en el primer balón que tocaba el extremo argentino. Las Palmas se volcó con el estado anímico recobrado e igualó el choque con un gran cabezazo de Calleri, elevándose más que nadie para rematar un centro de Míchel Macedo.

El tramo final fue trepidante. Rémy cabeceó un balón que escupió el travesaño y también pudo ganar el Espanyol con una gran volea de Gerard que pasó cerca de un poste, en el tiempo de prolongación. En la última jugada del choque, Jurado derribó a Jonathan Viera dentro del área y el propio jugador grancanario lanzó la pena máxima, pero Pau López adivinó el sitio elegido por el atacante internacional y rechazó su disparo, dejando la miel en los labios al equipo local.