El Liceo estará, al menos, una semana como líder de la OK Liga. Porque ayer ganó al Caldes gracias a una remontada en la segunda parte liderada por un inspirado Sergi Miras. Y porque el Barça no jugará el partido correspondiente a esta jornada, contra el Girona, hasta el próximo sábado. Así que el conjunto coruñés adelanta al azulgrana, se pone con un punto de ventaja y deja toda la presión al máximo rival antes del duelo directo que será el martes 13 en el Palacio de los Deportes de Riazor, la reedición de la final de la Copa del Rey de la semana pasada.

Los verdiblancos sabían que se jugaban mucho en Caldes, una pista en la que habían perdido en sus dos últimos desplazamientos. Y en la primera parte los locales demostraron por qué. Presionaron muy arriba, forzando al Liceo a tirar desde lejos, mientras que probaron a Malián desde todas las distancias. El meta se mostraba resolutivo, pero en una inocente pérdida de la defensa liceísta en el área Pol Galbas anotó el 1-0.

El segundo tiempo fue otra cosa. El Liceo salió a por todas. Al Caldes incluso le costaba mantener la posesión de la bola y los coruñeses empezaron a inquietar con insistencia la meta de Campor. A David Torres le hicieron penalti. Sergi Miras ejecutó a la perfección para empatar. La amenaza eran las faltas. Nueve en el minuto 35. Para tranquilidad, el Liceo hizo el segundo, de Josep Lamas, aunque el mérito fue todo de Miras, que se fue de tres jugadores y le dio una asistencia al segundo palo al capitán, al que Juan Copa le había dicho minutos antes, en un tiempo muerto, que no se moviera de ahí.

El equipo verdiblanco tuvo un penalti y una directa para sentenciar que fallaron Miras y Eduard Lamas. Eso obligó a Malián a lucirse para atar la victoria al parar la directa de Rovira a un minuto y 32 segundos para el final. Justo sobre la bocina, Miras redondeó su soberbia actuación con el 1-3.