Una marea de color viola, un estadio desolado por la pena, jugadores con rostros compungidos después de una semana de dolor: la Fiorentina (9º) ganó 1-0 ayer ante el Benevento en medio de un emotivo ambiente su primer partido sin Davide Astori, su capitán, fallecido hace una semana.

Los minutos de silencio suelen durar 60 segundos, pero el de este domingo en el estadio Artemio Franchi se prolongó más, como si nadie se atreviese a interrumpirlo.

El silencio se había hecho antes de que el árbitro lo decretase, un silencio irreal en un estadio de fútbol. Durante varios minutos sólo se escuchó el chocar de las manos de los jugadores del Benevento contra sus homólogos de la Fiore. Delante de ellos, niños con las camisetas del Cagliari y de la Fiorentina, los dos clubes que marcaron la trayectoria de Astori.

"No he hecho el equipo en función de los que sufren más o menos. Todos sufrimos mucho. Teníamos que volver al campo y ha estado bien hacerlo en medio de los nuestros. Pero desafortunadamente nada será como antes", señaló el entrenador local Stefano Pioli.

Antes del inicio se proyectó en las pantallas del estadio un documental en homenaje al central, con la música Tierra de hombres del italiano Jovanotti.

"Hay hombres que no mueren nunca, hay historias que pasan a la eternidad. Buen viaje capitán", "las lágrimas de toda una ciudad", "unidos por la eternidad", "Florentino para siempre", "Ciao Davide", "Verdadero capitán, un hombre de otra época", decían las pancartas.

"Y con el número 13, capitán para siempre, ¡Davide Astori!", lanzó el speaker del estadio. Miles de globos blancos y morados volaron por el cielo de Florencia antes del inicio del partido.

Los alrededores del Artemio Franchi presentaban banderas, fotos, dibujos de niños, bufandas, camisetas, todo con motivo de Astori. Además de coronas de flores enviadas por clubes de toda Italia y depositadas por numerosos aficionados locales.

La lluvia sirvió para camuflar las lágrimas. "Ellos harán lo que puedan, eso no tiene importancia. Bravo por ellos si consiguen jugar bien, yo no podría", explica Matteo, un aficionado de 30 años.

También fue un partido extraño para el colista Benevento. Con pocas opciones de salvación, su entrenador Roberto De Zerbi lanzó la víspera: "Mejor descender que ganar en un momento tan trágico".

"Fue un partido muy especial, sinceramente ha sido muy difícil entrar como habríamos tenido que hacerlo", señaló el francés Bacary Sagna, capitán del Benevento.

En el minuto 13, el del dorsal de Astori, se desplegó un tifo con las letras Davide 13 de color blanco sobre fondo morado.

La Fiorentina abrió el marcador en el minuto 25. El autor fue Vitor Hugo, quien portaba en la espalda el número 31, el de Astori pero con las dos cifras invertidas.

El brasileño, sustituto de Astori, anotó a pase de Saponara, uno de los jugadores más afectados por la muerte de Astori, y que fue titular por primera vez esta temporada. Vitor Hugo sacó una camiseta con la imagen de Astori ante la que realizó el saludo marcial.

El estadio cantó un capitano, c'è solo un capitano (un capitán, no hay más que un capitán)."Espero que Davide esté orgulloso de nosotros. Siempre estará en el campo con nosotros", señaló el centrocampista Marco Benassi tras este emotivo partido.