A Coruña se echó a la calle para descubrir el amplísimo mundo del deporte. Cuarenta y nueve disciplinas diferentes protagonizaron ayer en Riazor la trigésimo primera edición del Deporte en la Calle y en la Playa, en la que el sol ayudó a que la afluencia de público fuese extraordinaria.

Desde las once de la mañana niños, y no tan niños, probaron un túnel de bateo al lado de las Esclavas, intentaron manejar un frisbee sobre la arena de la playa, montaron a caballo, se calaron una careta de esgrima, tiraron a canasta a lo mejor por primera vez en su vida? Y esto era de lo que se trataba, de que el que lo quisiera pudiera tratar de jugar a diferentes disciplinas deportivas con las que nunca se había atrevido antes.

E ir de un stand a otro tenía premio. En la primera estación deportiva cada participante recibía un carné con la palabra deporte en la que cada letra estaba acompañada por tres casillas. Tras probar una disciplina se sellaba una de las casillas yasí se conseguía una camiseta y rifas para el sorteo de regalos a las dos de la tarde.

Con este ya tradicional día del deporte, tanto el Concello como todos los clubes deportivos y demás entidades organizadoras y participantes pretenden, además de dar a conocer sus deportes, también fomentar el ejercicio físico y la vida saludable tanto en mayores como en pequeños.

Y enfocada hacia este objetivo, ayer Termaria Casa del Agua fue la encargada de impartir primero una sesión especial de Ballet Fit, de 11.00 a 11.45 horas, y posteriormente una clase de zumba, desde las 11.45 a las 12.30 en un escenario colocado en la explanada del Palacio de los Deportes. El público femenino fue mayoría para esta disciplina que tuvo mucha aceptación entre las asistentes. En esta edición, las obras de cambio de la cubierta del estadio de Riazor provocaron que cobrase más importancia que en años anteriores el arenal coruñés donde se instalaron ayer las actividades que últimamente se colocaban en Manuel Murguía.

Hockey en línea, fútbol gaélico, dardos, chave, frisbee, cross training, colombofilia (suelta de palomas), roller derby, parkour, rápel orientación y petanca son algunas de las actividades menos conocidas que salen reforzadas de eventos como el de ayer en el que la ciudadanía tiene acceso a los deportes minoritarios y en algunos casos se engancha a ellos.

Además, esta trigésimo primera edición tuvo un componente inclusivo con la oferta de actividades adaptadas por parte de Grumico (Grupo de Personas con Discapacidad de A Coruña). Así dentro de las cuarenta y nueve estaciones en las que se podía practicar algún deporte podían encontrarse varias actividades adaptadas como el tenis, la esgrima o el boxeo.

En la presentación del evento celebrada en María Pita, el concejal de Culturas, Deporte e Coñecemento, José Manuel Sande, destacó el aumento de entidades colaboradoras en esta iniciativa, que este año llegaron a las 66 entre las que se encontraban las diferentes federaciones deportivas y clubes, y varios colectivos vinculados al ámbito de la educación o de la salud como ABAC (Asociación de Bulimia y Anorexia de A Coruña).