En el tercer partido de cuartos de final, Suecia e Inglaterra miden sus fuerzas a las 16.00 (Cuatro), en el Samara Arena, el encuentro será dirigido por el árbitro holandés Björn Kuipers. Se ven las caras la selección sueca, la gran sorpresa entre los clasificados para cuartos y la joven selección inglesa. De este encuentro saldrá el semifinalista que se enfrentará el próximo miércoles 11 contra el ganador del Rusia- Croacia.

Suecia se deshizo en octavos de final del combinado suizo por un solitario gol de rebote. Con un juego poco vistoso y bastante defensivo, basado en las recuperaciones y salidas rápidas al contragolpe.

Para este partido el seleccionador sueco Janne Andersson, pierde por sanción a su lateral titular Mikael Lustig, su lugar en el once será ocupado por su compañero Emil Krafth. Larsson pieza fundamental en el centro del campo sueco recuperará su puesto en once, tras perderse el partido de octavos por sanción.

El seleccionador solo se centra en su equipo y no se fija en el rival como asegura: "Nos centramos al cien por cien en intentar lograr un buen resultado en el partido de mañana. Y si ese resultado llega, nos pondremos a pensar en el siguiente partido", y "para ganar el partido de mañana (hoy) no hace falta una sola cosa. Hay muchos factores que influirán. Tendremos que defender bien, necesitamos tener coraje y debemos pensar bien cómo atacar, entre otras cosas", comento sobre el partido.

Inglaterra por su parte viene de eliminar a Colombia en la suerte de los penaltis, con una de las selecciones más jóvenes, con un sistema basado en el 3-4-3 y con un juego combinativo en el centro del campo. Además de contar con una de las armas más letales del Mundial, con el pichichi Harry Kane que lleva 6 goles anotados en tan solo tres partidos. "No pensamos en ser campeones del mundo, porque queda mucho, apenas acaba de comenzar la segunda parte de este torneo", comentó Kane.

Ambas selecciones llegan al cruce en un estado de optimismo generalizado y con una sensación de que se encuentran ante una oportunidad única: la de plantarse en una semifinal de un Mundial. Los suecos -que han jugado cuatro- no consiguen desde hace 24 años en el de Estados Unidos 94 y los ingleses -presentes en dos- desde hace 28, en el de Italia 90. Ya solo queda ver quien se clasifica.