Luis Enrique Martínez se convirtió ayer en el seleccionador español número 55 tras el acuerdo unánime de la junta directiva de la Federación Española de Fútbol (RFEF) para su nombramiento, 24 horas después del anuncio de la marcha de Fernando Hierro. El malagueño puso fin a su corta etapa como técnico del banquillo español y a dos periodos como director deportivo de la Federación, la primera entre 2007 y 2011, y la segunda desde noviembre de 2017 hasta ayer. Sus cuatro partidos en el banquillo de España durante el Mundial todavía en juego se saldaron con un empate con Portugal (3-3), una victoria sobre Irán (0-1) y un empate con Marruecos (2-2) en la fase de grupos, previos al cruce con Rusia.