Francia está todavía un peldaño por debajo de las tres favoritas, pero con su mejor generación de la historia está empezando a dar guerra. Lo hizo en la Taça Latina, competición sub 23 que se disputó en marzo y ganada por España, en la que dejó grandes sensaciones. Lo que confirmó lo que se esperaba de unos jugadores que en los últimos años están dando el salto a las mejores ligas europeas. En España ya están tres de ellos -el cuarto en camino con el fichaje por el Lloret de Le Berre-, los hermanos Di Benedetto, Carlo en el Liceo, Bruno y Roberto en el Lleida, culpables en cierta medida del alto rendimiento francés en los últimos años.

En categoría absoluta, sin embargo, todavía no han podido dar el salto y sorprender a España, Italia y Portugal. A su favor, que es un grupo muy unido, que llevan mucho jugando juntos ya que todos son de edades muy similares. Muy jóvenes. Salvo Mathieu le Roux, ninguno supera los 25. En su contra, la falta de rotación. Fabien Savreux presentó una convocatoria con solo ocho nombres, dos porteros y seis jugadores, por lo que solo habrá dos recambios para dar frescura a los titulares.