Es coruñés, juega en el Liceo, el Palacio de los Deportes de Riazor es como el patio de su casa y desde hoy disputa el Campeonato de Europa de hockey sobre patines con la selección española. Eduard Lamas (A Coruña, 1990) reconoce que el hecho de jugar en casa es algo "muy bonito" para él, incide en el hecho de que son favoritos tras haber ganado el Mundial el año pasado, pero no echa las campanas al vuelo: "Va a estar todo muy igualado y se decidirá por pequeños detalles".

Por eso no se quiere confiar. "Un partido malo le puede salir a cualquiera, los rivales es gente que no tienes muy controlada porque no puedes hacer un scouting previos y si no haces tu mejor versión, se te puede complicar un partido", analiza mirando también hacia el debut de esta noche ante Inglaterra.

La selección española lleva seis semanas concentrada en Barcelona. "Fue muy duro, porque el verano en Barcelona aprieta", reconoce, pero también afirma que tendrá "su recompensa". España va a por el oro y no le faltan argumentos. "Ya nos conocemos del año pasado, tenemos un trabajo previo muy bueno y si vamos todos a una, el objetivo es ser campeones de Europa", analiza sobre lo que le espera al conjunto del seleccionador Alejandro Domínguez.

El tiempo que Eduard Lamas estuvo en Barcelona le sirvió para recuperarse completamente de la lesión, una rotura abdominal, que le obligó a parar en el último tramo de OK Liga con el Liceo. "Hice un trabajo de prevención muy bueno con los fisios y el preparador físico. Gracias a dios ya estoy al cien por cien y preparado para disputar el Campeonato de Europa en mi casa", sentencia. En Nanjing ya fue uno de los jugadores más decisivos, a lo que apunto en casa, en su Palacio y ante su gente.