La selección española de hockey hierba conquistó ayer una histórica medalla de bronce en el Campeonato del Mundo femenino, que se disputó en Londres (Reino Unido), después de ganar por 1-3 ante el equipo de Australia en la final de consolación después de haber perdido en semifinales contra Irlanda en los shoots outs.

Las Red Sticks doblegaron a las australianas para hacerse así con su primer metal en una cita mundialista. Así, merced a un inicio más inspirado que el de sus rivales, España no tardó en ponerse por delante en el marcador gracias a un penalti-córner aprovechado por María López en el minuto 11.

Apenas 3 minutos después, las jugadoras españolas ampliaron su ventaja después de que Bea Pérez robase una pelota dentro del área australiana y cediese atrás con el plan de que Berta Bonastre rematase para rubricar el 0-2. A partir de entonces, las aussies fueron incapaces de hincar el diente a la defensa contraria.

En el minuto 51, Alicia Magaz marcó el 0-3 al beneficiarse de una habilidosa jugada de la omnipresente Bea Pérez por el costado derecho. La delantera se internó por esa banda, dribló a un par de oponentes y pasó hacia el corazón del área para que Alicia Magaz controlase rápidamente y disparase al fondo de las mallas.

Por su parte, Kathryn Slattery fue la autora del insuficiente gol marcado por las oceánicas en el minuto 55. Ya era demasiado tarde para la remontada y de hecho Australia generó muy poco peligro hasta el final. Las españolas celebraron su medalla entre multitud de abrazos y sonrisas en la pista del Lee Valley Hockey and Tennis Centre.