El Extremadura obtuvo un punto en Oviedo en su reencuentro con la segunda División. El próximo rival del Deportivo (viernes, 20.00 horas) apenas se acercó a la portería del equipo asturiano, pero en una de sus escasas apariciones en ataque Barrera anotó para igualar el gol del exdeportivista Toché había marcado en la primera parte y establecer el empate definitivo.
Fue un partido muy extraño, pues el Oviedo fue, por una parte, fue muy superior en el juego y gozó de numerosas ocasiones para conseguir una amplia victoria en el Tartiere. Por otra, el tanto encajado en el único remate a puerta de los visitantes hizo volar de Oviedo dos puntos en una aislada acción a balón parado.
Desde el comienzo los asturianos fueron muy superiores y entraban por las bandas con facilidad. Sin embargo, en la segunda mitad los locales bajaron el ritmo dejando algo más de posesión a los extremeños, aunque estos prácticamente se limitaban a colgar balones al área en las faltas pero sin crear mayor peligro ante la portería de Alfonso Herrero.
El Oviedo estuvo desacertado y desaprovechó una muy clara ocasión de iniciar la temporada con una victoria. Mucho mérito de un Extremadura que se presentó en el Tartiere con multitud de bajas y que aprovechó el balón parado para llevarse su primer punto de la temporada de su regreso a Segunda.
Con todo, fueron numerosas ocasiones desaprovechadas por los azules, que cambiaron de dinámica y juego con respecto al año pasado con mucho balón en el centro del campo y combinaciones de juego interior y bandas.
El Mallorca, otro de los equipos que este verano obtuvo el premio del retorno a la Liga 123 (Segunda), se reestrenó en la categoría de plata por la puerta grande, con una victoria corta pero justa ante un Osasuna que se vio superado de principio a fin por el conjunto de Vicente Moreno. El entrenador valenciano apostó en el partido inaugural por los mismos jugadores que consiguieron el ascenso el pasado mes de junio salvo la presencia de Carlos Castro, el delantero asturiano llamado a ser la referencia en la punta de ataque.
El penalti transformado por Artá supuso el final de una primera parte dominada por los locales, decididos a que Son Moix sea esta temporada un fortín. Afrontaron el partido decididos a resolverlo por la vía rápida, y si no fue así fue por la falta de puntería y el buen hacer del joven guardameta navarro.
El Mallorca dio una muy buena impresión, sobre todo en la primera parte. El equipo se ha mostrado firme en defensa, solvente en el centro del campo e incisivo en ataque. Mereció el equipo balear una mayor ventaja, pero ya está bien. El grupo de Moreno empieza sumando de tres en tres, pero casi tan importante como esto es la imagen que dio ayer.
Cierto que fue ante un adversario con ausencias, sobre todo en la portería, que cubrió de Juan Pérez, el tercer guardameta de Osasuna, a causa de la lesión que sufren los dos primeros guardametas del conjunto navarro.
