La intensidad y la velocidad del juego del Celta Zorka sentenciaron 53-104 a un inocente Maristas que únicamente lleva diez días de entrenamientos preparando el asalto a la Liga Femenina 2. El equipo coruñés aguantó los primeros compases del encuentro pero nada más. "Ellas nos sacaron de la pista por intensidad, contacto y por velocidad en el pase. Son cosas básicas que tenemos que mejorar lo antes posible", reconoció el técnico del conjunto colegial Rubén Vázquez. En el segundo cuarto el equipo coruñés dio la cara pero "el Celta es un equipo que está por encima de nosotros por el nivel económico y por capacidad. Es un equipo puntero al que se le escapó el ascenso en el último partido y hoy, -por ayer-, han sido una buena piedra de toque para nuestra preparación porque ha quedado demostrado que en en la Liga Femenina 2 hay que competir desde el minuto 1. Ellas van a acabar primeras o segundas y nosotras por abajo pero con la intención de poder asustar a cualquier equipo".

Sobre el encuentro de ayer en particular, Vázquez reconoció como merecida la victoria rival: "Estamos por debajo de ellas y tenemos que aprender de este tipo de partidos y adaptarnos a los nuevos rivales. Estamos muy ilusionados por participar por primera vez en la Copa Galicia y ante Cortegada estuvimos bien la primera parte, pero el Celta se escapó ya en el primer cuarto 7-24. En el segundo ya nos fuimos del partido y aquí cuando desconectas los rivales te pasan por encima".

El 6 de octubre Maristas debutará e la Liga Femenina 2 en Avilés y hasta entonces tiene mucho trabajo que hacer: "Estamos lejos de lo que esperamos pero con el paso de los entrenamientos el equipo se adaptará a las cosas nuevas. El camino hasta donde queremos llegar nos llevará tiempo y hasta entonces vamos a sufrir pero a ilusión no nos va a ganar nadie, y la ilusión también juega", finalizó Rubén.