- ¿Cómo entrena?

-En invierno, fundamentalmente en la piscina del Club del Mar, para mantenerme en forma que aquí en Galicia ya se sabe que nos pasamos con los cocidos. Pero la única forma de entrenar es salir a pescar. Horas y horas de mar.

- ¿Qué es lo más duro de la pesca submarina?

-Por un lado que es muy estratégica así que si no haces algo bien en competición, después te comes mucho la cabeza. Por otro, el invierno se hace muy duro en Galicia. Aunque llevamos neopreno, el agua está muy fría, a unos once o doce grados, y además aquí hay una ley autonómica que nos restringe las salidas. De octubre a abril solo podemos salir los fines de semana y los festivos. Y puede que esos días el mar esté impracticable. Me he tirado dos meses y medio sin poder tocar el agua.

- ¿Es un deporte respetuoso con el medio ambiente?

-La pesca submarina es muy ecológica. Porque somos muy selectivos. Nunca tiraríamos a un pez pequeño y ya vamos a por los ejemplares que sabemos que han cumplido varios ciclos de reproducción. Además, en los torneos las capturas se donan a asociaciones benéficas. En el que se hace en el Club del Mar, que lleva 22 años celebrándose, se llevan a la Cocina Económica.