El Leyma lo intentó pero no pudo encadenar una segunda victoria en el inicio de la temporada. El equipo de Gustavo Aranzana cayó ayer en la pista del Real Betis Energía Plus 96-88 después de cuarenta minutos locos en los que los dos conjuntos llegaron a tener sabrosas ventajas de más de diez puntos. La juventud e inexperiencia de la plantilla no permitió al equipo coruñés levantarse en los momentos clave del encuentro, y tampoco el conjunto sevillano ayudó ya que se mostró como una escuadra sólida y por momentos inexpugnable.
El choque comenzó muy igualado hasta que Zach Monaghan encadenó dos triples consecutivos y puso al Leyma por delante 15-23 a poco más de tres minutos para el final de los primeros diez minutos. En el segundo parcial empezó el baile de números. En los compases iniciales el equipo coruñés mantuvo la ventaja, e incluso la aumentó hasta los once puntos, 28-39. Pero entonces el conjunto local reaccionó y endosó a los naranjas un parcial de 18-6 en poco más de un minuto y medio. Gustavo Aranzana pidió un tiempo muerto y frenó la fiesta bética. El técnico vallisoletano dio instrucciones a sus jugadores y las aguas volvieron a su cauce. A tres minutos del descanso ganaban los locales pero después de la arenga del cuerpo técnico, el equipo naranja volvió a enchufarse y consiguió llegar al final del segundo cuarto por delante en el marcador del pabellón San Pablo 50-53.
Los veinte minutos restantes ya tuvieron un claro color verdiblanco. El equipo de Curro Segura, exentrenador del Obradoiro compostelano, llevó la batuta y no se permitió ni un desliz para estrenar la temporada como local con una victoria. En el tercer parcial del encuentro, los sevillanos anotaron veintiocho puntos, por únicamente trece de los coruñeses. Este dato ya deja claro que estos diez minutos fueron los más flojos de los jugadores coruñeses. Aranzana rotó a sus hombres, pero los errores y las pérdidas de balón condenaron al Leyma al sufrimiento.
La escuadra naranja entró en los diez minutos decisivos con doce puntos de desventaja, 78-66, pero con la valiente intención de darle la vuelta al marcador. Lo intentó en varias ocasiones pero no pudo acercarse a menos de ocho puntos de los jugadores verdiblancos. Al final pesó la juventud del Leyma y la solidez del Betis. Sin embargo cabe destacar que en el equipo coruñés solamente un jugador se quedó sin anotar y cinco consiguieron más de diez puntos lo que habla mucho y bien del Leyma como un equipo equilibrado, y no como un conjunto de individualidades. Ahora queda seguir trabajando y esperar a Palma el domingo en Riazor.
