La masa social del Básquet Coruña aprobó ayer la propuesta de transformación voluntaria en Sociedad Anónima Deportiva remitida por la Junta Directiva en una asamblea extraordinaria que tuvo lugar en el hotel Eurostars Atlántico. Previamente a la junta extraordinaria se celebró la ordinaria en la que se aprobaron todos los puntos del orden del día, entre los cuales estaban las cuentas y el presupuesto para el ejercicio 2018-19.

Pero el punto de atención del día estaba en la asamblea extraordinaria. El club naranja deberá cubrir un capital social de 60.000, el mínimo exigido por ley al disponer la entidad de un patrimonio neto positivo. En un primer momento, el Básquet Coruña intentará cubrir, y todo parece indicar que lo conseguirá, los 60.000 euros aunque después acometerá una ampliación de capital hasta el millón ochocientos mil euros que exigen los estatutos de la ACB para los equipos que compiten por primera vez en la categoría.

El próximo lunes el club enviará toda la documentación de su propuesta de transformación voluntaria en SAD al Consejo Superior de Deportes que tendrá que aprobarla. La directiva naranja espera tener el sí del CSD en el mes de enero, momento en el cual comenzará la venta de acciones. Después de un anuncio obligatorio en prensa, comenzará la venta de títulos por un plazo de treinta días. En este primer mes únicamente podrán adquirir títulos los socios del club hasta un máximo de siete por persona. Tras esta fase las acciones sobrantes se ofrecerán, en unos segundos treinta días, a los socios que hayan suscrito las siete acciones. En el caso de que todavía sobren títulos se abriría la compra a toda la ciudadanía, aunque esta posibilidad es casi un imposible.

Una vez cubiertos los 60.000 euros se realizará la escritura de constitución, se inscribirá la SAD en el registro mercantil y se celebrará una Junta de Accionistas en la que se elegirá al consejo de administración, que será la actual directiva, y se anunciará una ampliación de capital. En este momento, el Básquet Coruña SAD intentará llegar hasta el millón ochocientos mil euros de capital, que es lo que aproximadamente exige la ACB. De no llegar hasta esa cantidad, la sociedad se quedará con el capital que se haya conseguido cubrir.

La directiva tuvo el apoyo incondicional de los setenta y cuatro socios, entre presentes y representados que acudieron ayer tanto a la asamblea ordinaria como a la extraordinaria. Tanto el presidente Roberto Cibeira, como el vicepresidente y demás miembros de la directiva explicaron punto por punto lo pasos a seguir y la documentación a remitir al Consejo Superior de Deportes. Además de aprobar la transformación voluntaria en SAD en la asamblea extraordinaria, los socios también dieron el sí en la ordinaria a la delegación de facultades en el presidente y vicepresidente del club para poder solicitar préstamos, créditos o líneas de aval en el supuesto de que la situación económica del club requiera.

El paso hacia el futuro está dado y ahora, tras el envío de toda la documentación exigida al CSD, al club solamente le queda esperar a la aprobación del organismo estatal para dar el pistoletazo de salida a la venta de acciones a los socios. Se pondrán en movimiento 1.200 títulos a razón de cincuenta euros cada uno, que completan los 60.000 que exige como mínimo la ley.