El Granada confirmó ayer que se está produciendo "una investigación tanto interna como externa" tras la aparición en sus instalaciones de "determinados dispositivos", cámaras y micrófonos ocultos, que le han llevado a denunciar ante la Policía Nacional ser víctima de una supuesta red de espionaje.

El club rojiblanco emitió ayer un comunicado para anunciar que "tras los hechos acontecidos durante las últimas semanas, se está procediendo a una investigación, tanto interna como externa, acerca de la aparición de determinados dispositivos hasta ahora desconocidos por la dirección de la entidad".

Algunos de estos dispositivos, en concreto cámaras y micrófonos, fueron descubiertos por personal del club y estaban escondidos en los despachos de algunos dirigentes, lo que llevó a sus responsables a denunciar los hechos ante la Policía Nacional. Trabajadores con responsabilidad en la entidad vinculados a las áreas de informática y de seguridad han sido despedidos tras el descubrimiento de esta supuesta red de espionaje, que está siendo investigada por la Policía Nacional.

Estos hechos se producen poco más de nueve meses después de que la Policía Nacional registrase las oficinas del club en el marco de la denominada operación Líbero, en la que fue detenido el expresidente del Granada Quique Pina por delitos de blanqueo de capitales, insolvencia punible y contra la Hacienda Pública.