El Liceo juega primero, a las cinco de la tarde en Alcobendas, y estará pendiente de lo que pase cuatro horas después en Cataluña, donde el Reus y el Barcelona juegan un duelo en la cumbre (21.00 horas). Los verdiblancos pueden meter presión. Si ganan en Madrid, se pondrán a un solo punto de los culés, que afrontarán uno de sus partidos más difíciles y que tendrán que jugar, además, con el cansancio acumulado de un viaje transoceánico esta misma semana, ya que el lunes de madrugada se proclamaron campeones de la Copa Intercontinental en Argentina. Los azulgrana todavía tienen un partido menos, por lo que el margen es grande, pero si se cumplen estas dos premisas, la OK Liga volvería a tener vida. El Reus, por su parte, también estará presionado por un posible triunfo del Liceo porque en su pugna por la segunda posición los coruñeses volverían a escaparse a tres puntos si ellos no consiguen ningún resultado positivo ante el Barça. El tercero en discordia es el Caldes. El conjunto dirigido por Eduard Candami es la revelación de la temporada. Cuarto con 29 puntos, los mismos que el Reus y el Liceo, recibe esta jornada al Noia, séptimo clasificado. También puede sacar provecho de los tropiezos de sus rivales para situarse en solitario en la segunda plaza.