El nuevo propietario del Reus Deportiu, US Real Estate Investment, sigue adelante con las gestiones para poder continuar en la Liga 1/2/3 pese a los problemas económicos del club, que esta semana aplazó su partido contra el Albacete, tras haber hecho lo propio en la jornada anterior con Las Palmas.

Los propietarios estadounidenses indicaron mediante un comunicado que están "trabajando con el Consejo Superior de Deportes para aprobar la venta" de forma definitiva. Pese a que el antiguo dueño, Joan Oliver, vendió el club el pasado domingo, hasta que el CSD no lo comunique tras revisar la documentación, la operación no será efectiva.

Según fuentes cercanas al club, siete de los doce futbolistas que seguían en el primer equipo habrían decidido marcharse del Reus acogiéndose a un documento privado facilitado por Oliver .

El antiguo propietario prometió una salida a los futbolistas si no vendía el club ni cobraban la nómina de diciembre. En el comunicado, el club reconoció que hasta "catorce futbolistas" del extranjero fueron "invitados" a Reus y también que "los jugadores y empleados cobrarán antes de final de mes". A los futbolistas se les debe una nómina, pero que el cuerpo técnicos del primer equipo y del filial y los empleados no cobran desde septiembre.