Un inoperante Sporting encajó su tercera derrota consecutiva en casa, esta vez ante Osasuna, que se aprovechó de dos errores defensivos para prolongar su racha victoriosa y presentar su candidatura al ascenso directo. Los navarros se acuestan como líderes provisionales de Segunda con 47 puntos, dos más que el Albacete (45) y cuatro que el Deportivo, quinto con 43.

Un cabezazo de Unai García que salió muy elevado en el saque de una falta fue el primer intento visitante de poner en apuros a un Mariño que al igual que Rubén Martínez en la otra portería apenas tenían ocasión de intervenir.

Sin embargo, Osasuna enlazó unos minutos de fuerte presión sobre la salida del balón del Sporting y empezó a crear peligro, lo que puso nerviosa a la defensa local. Se adelantó en el marcador antes del descanso en el saque de un córner que cabeceó hacia atrás Rubén García para sorprender a la defensa local, que no acertó a tapar un remate de Oier.

El mal juego local provocó constantes silbidos desde una grada que veía que su equipo podía encajar la tercera derrota consecutiva en campo propio y, lo que es peor, dejaba una pésima imagen.

Torres, que había fallado uno, tuvo otra ocasión clara y esta vez no la desaprovechó al rematar de potente tiro a media altura un balón que pasó por entre tres defensas rojiblancos sin que ninguno acertara a despejar. Un gol que acabó con la paciencia de los aficionados, que ven cómo las opciones de luchar por el ascenso se escapan a marchas aceleradas mientras que Osasuna, sin hacer un buen partido, prolonga su excelente racha.