El desenlace de la final de Copa del Rey trae cola y amenaza con la estabilidad de las competiciones nacionales. El Madrid, que se considera gravemente perjudicado por la concesión de la canasta de la victoria a Tomic, ha insinuado que podría retirarse de la ACB para centrarse en la Euroliga. El domingo, el responsable de la sección del Madrid, Juan Carlos Sánchez exigió a los responsables de la ACB que reconocieran públicamente el error en esa jugada, algo que hizo ayer en una nota oficial la Asociación de Árbitros de Baloncesto (Aeba).

En el primero de los puntos del comunicado, la Aeba reconoce "la existencia de errores graves en el final del partido". Y, a continuación, señala que "aceptamos y acatamos las decisiones que pueda tomar la ACB en relación a dichos errores". Sin hacer referencia en ningún momento a la falta flagrante que Randolph comete sobre Singleton a 11 segundos del final, Sánchez critica a los árbitros por no apreciar en el instant replay que la acción de Randolph ante Tomic "no es tapón, es rebote".

Juan Carlos Sánchez aprovechó para recordar otro desenlace polémico, el de la pasada temporada, en el que el Madrid reclamó una falta de Claver sobre Taylor en el último segundo: "Es el segundo año seguido que ocurre una desgracia en el arbitraje contra el Madrid. Si viendo el instant replay entre los tres no han visto tapón legal es que algo se está haciendo mal".

La amenaza del Madrid de abandonar la Liga ACB, expresada de forma indirecta, se topa con la legislación de la Euroliga. En el artículo 5.3 de sus estatutos se precisa que uno de los requisitos para estar en la competición europea es "la participación en el campeonato doméstico".