El Sporting de Gijón no levanta cabeza y suma su tercera derrota consecutiva en El Molinón, esta vez ante el Rayo Majadahonda (2-3) y también tercer revés seguido en los tres últimos partidos de Liga que aleja a los asturianos de sus objetivos iniciales para desencanto de una afición que acabó protestando contra jugadores y directiva al finalizar el encuentro.

El Sporting llevaba la iniciativa y llegaba, aunque sin demasiado peligro, a la meta de Basilio. Carmona, Djurdjevic y Cofie pudieron adelantar a los rojiblancos antes de que Ruibal ya amenazara a Mariño con un disparo que impactó en el palo con el portero ya superado.

El Rayo buscó mantener la pelota, llevando a su estilo el partido jugando al ritmo que más le interesaba y logró manda en el partido y en el marcador. Los de Iriondo dejaron pasar los minutos hasta que el colegiado pitó el final del partido, momento en el que arreciaron las críticas de los aficionados presentes en El Molinón contra jugadores y directiva.

Lejos parece haber quedado ya el efecto José Alberto López, el técnico del filial que se hizo cargo del equipo el pasado mes de noviembre tras la destitución de Rubén Baraja y que devolvió la ilusión a la afición sportinguista, tras saldar con tres victorias y un empate sus cuatro primeros partidos.

La confusión reina en estos momentos en el equipo gijonés, todo lo contrario que el Rayo Majadahonda, que parece conocer a la perfección sus debilidades y fortalezas.