El austriaco Dominic Thiem se proclamó campeón del torneo de Indian Wells (Estados Unidos), primer Masters 1.000 de la temporada, después de remontar y sorprender al suizo Roger Federer, al que batió en tres sets por 3-6, 6-3, 7-5.

El jugador centroeuropeo logró su duodécimo título individual y el de más prestigio de su carrera deportiva después de haber perdido las dos finales en el Mutua Madrid Open ante Rafa Nadal y Alexander Zverev en 2017, además de la pasada final de Roland Garros ante el balear.

Además, Thiem se convirtió en el primer jugador de su país en ganar un torneo de esta categoría desde que lo hiciese Thomas Muster en 1997 precisamente en Miami, el siguiente Masters 1.000 que da inicio esta semana y donde será uno de los favoritos.

Para ello, el austriaco, de 25 años, tuvo que frustrar a Federer, más descansado tras no jugar su esperada semifinal ante Rafa Nadal por la lesión del manacorí, pero que no pudo conquistar su sexto título en el desierto californiano, lo que habría supuesto su trofeo número 101.

El tenista de Basilea empezó bien y con un rápido break confirmó su teórico mayor favoritismo situando un peligroso 3-0 en el marcador. Thiem no se descompuso y recuperó la rotura en el séptimo juego, pero Federer le replicó con una más, y la última que conseguiría en el partido, para luego no perdonar con su servicio y hacerse con el primer parcial.

Ninguno de los dos se relajó con el saque, pero tuvo que ser Thiem el que tuviese nervios de acero en los compases finales del tercer set, primero levantando un peligroso 30-40 con 4-3 para su rival y luego sin temblarle el pulso cuando el exnúmero uno del mundo restaba para ganar el título. En cambio, Federer entregó de forma inesperada el suyo en el juego siguiente y el centroeuropeo ya no perdonó para conquistar el primer Masters 1.000 de la temporada que acaba de empezar.