El entrenador del Oviedo, Juan Antonio Anquela, aseguró que el derbi de mañana ante el Sporting será un partido precioso en el que los técnicos tendrán que poner "calma y cordura", y aseguró que a los oviedistas su equipo les debe tres cosas fundamentales: "entrega, predisposición y actitud".

"A nuestra gente hay que mirarla al final del partido y decirles que lo hemos dejado todo en el campo. Nunca podremos llegar a su nivel, y eso me duele. No vamos solos, vamos con ellos que no nos fallan nunca y si nos hubieran dado 5.000 entradas, se hubieran agotado igualmente en pocos minutos", comentó el técnico tras venderse todas las localidades de visitante.

El jienense destacó que el partido del domingo tiene que ser "una fiesta del fútbol asturiano" porque, aunque no se quiera ver así, "Sporting y Oviedo se necesitan", y abogó por tener claro que pase lo que pase en el choque, el campeonato sigue.

"Tenemos que ir de la mano en muchas cosas queramos o no. He vivido los derbis anteriores de la misma manera, con la tranquilidad que requiere, porque será a la hora de la verdad cuando tengamos que hacer lo que corresponde. Para bien y para mal, después del domingo no se acaba la Liga", advirtió el propio Anquela.

El entrenador carbayón quiere que los suyos se alejen del "ruido externo" para no tener una presión añadida y reconoce tener dudas en el once, porque sus futbolistas tienen un buen rendimiento.